Quiéreme

¡Mírame!

¿Por qué?

Solo quiero que me mires.

 

¡Sonríeme!

¿Por qué?

Solo quiero que me sonrías.

 

¡Bésame!

¿Por qué?

Solo quiero que me beses.

 

Y así, poco a poco, haciendo caso de la imagen que estaba al otro lado del espejo, empezó a quererse.

Y así, paso a paso, empezó a recuperar su estado de felicidad.

 

 

mirror-1548409

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s