Soldado Posted on agosto 17, 2014 por Archimaldito Siempre que salía de la trinchera, precavido él, se ceñía el casco al cráneo, por si el cráneo no quería ceñirse a sus sesos. Comparte esto: Haz clic para compartir en X (Se abre en una ventana nueva) X Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva) Facebook Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva) LinkedIn Haz clic para enviar un enlace por correo electrónico a un amigo (Se abre en una ventana nueva) Correo electrónico Me gusta Cargando... Relacionado